Ciudades Sin Ti.
Y la tristeza le dura cinco días. Hasta que se encuentra en una película una actriz americana de la que se puede enamorar fácil y la tristeza se le pasa. Hoy me levante a las 5am, el hotel estaba más solitario que de costumbre, estos días de pandemia habían permitido que los pasillos y lobbies de hoteles sean un poco más amables en cuanto a personas que los frecuentan, un alivio para mí, ya que gusto de las soledades interiores y al parecer exteriores, me dirijo hacia el mar con la tarea encomendada, esa de tomar fotos al amanecer, aunque para captar amaneceres en la playa del rodadero hace falta más que contar con suerte y con cielos despejados de grises nubes que quedarían de las noches de aquel Enero ventoso, eran los alisios según me explicó un viejo guía turístico recuerdo su piel curtida por el sol y la salinidad de aquella ciudad costera, su piel es áspera al igual que un estropajo me dije. Volviendo a los amaneceres, era una cosa imposible de captar, al menos como a mí me gu